
Las fechas religiosas traen consigo una serie de tradiciones relacionadas con las creencias del cristianismo. En el caso de Semana Santa, se prohíbe comer carne roja durante el Viernes Santo.

Recordemos que durante Semana Santa los cristianos conmemoran los momentos de pasión, muerte y resurrección de Jesucristo. Esta fecha es precedida por la Cuaresma, es decir, una etapa de preparación que alcanza los 40 días, exactamente el tiempo que estuvo Jesucristo en el desierto.
De hecho, los creyentes más devotos dedican esta fecha para dedicarse a la reflexión y a la oración.
¿Cuál es el origen de esta restricción durante Semana Santa?
La explicación de por qué no se come carne durante el Viernes Santo tiene diferentes respuestas. Una de ellas radica en la búsqueda de purificación entre los cristianos y tiene como referente principal el ayuno que practicó Jesús en el desierto.
Otra creencia se remonta en la relación de la carne roja con diferentes pecados, como la lujuria, la ostentación o símbolos como la riqueza. Con esta restricción se busca mostrar sacrificio ante Jesucristo.

Asimismo, en algunos textos bíblicos se encuentra el pescado como protagonista. Uno de los principales pasajes es cuando Jesús realiza el milagro de los panes y los peces. Es por ello que, en esta época, algunos creyentes se decantan por la ingesta de pescado.
De forma similar, otra respuesta que explicaría esta prohibición durante Semana Santa es la interpretación de la carne como el cuerpo de Jesucristo en el día de su crucifixión. Debido a ese simbolismo, algunos cristianos consideran una falta de respeto que se coma carne en Viernes Santo.
Cabe señalar, que algunos cristianos más fervientes no consumen carne durante todos los días de vigilia, es decir, el Miércoles de Ceniza y todos los viernes de Cuaresma.