
Talento en la música hay en cada rincón de nuestro país. Un popular festival fue capaz de enaltecerlo durante seis ediciones. Lamentablemente, el proyecto llegó a su fin.
Son muchos los chilenos que asistieron a alguna de las ediciones de la Cumbre del Rock Chileno, evento que a lo largo de sus ediciones contó con la presentación de emblemáticos artistas como Los Bunkers, Los Tres, Jorge González, Chancho en Piedra y Mon Laferte, entre otros.
El evento musical se celebró entre 2007 y 2018, con especiales reconocimientos a figuras de la música nacional como Jorge González, Los Jaivas y Álvaro Henríquez. Dichos artistas fueron reconocidos con el galardón Premio Ícono del Rock.
La Cumbre del Rock se celebró por primera vez en 2007, y se realizó también en 2009, 2012, 2013, 2017 y 2018. Durante la última edición, se confirmó que el festival se haría de manera anual, sin embargo, la historia fue muy diferente.
¿Por qué se canceló la Cumbre del Rock Chileno?
El prestigioso festival iba a celebrar su séptima edición en el año 2019. La propuesta de ese año era tener el 50% del cartel con artistas mujeres, por lo que se prometió shows de artistas como Francisca Valenzuela, Ana Tijoux, Amanitas, Denise Rosenthal, Javiera y los Imposibles y Pascuala Ilabaca.
Los primeros problemas del evento surgieron cuando se cambió el recinto. En un comienzo, la Cumbre del Rock se iba a celebrar en el Club Hípico, posteriormente se anunció que el festival se trasladaba a la Medialuna Monumental de la ciudad de Rancagua.
Todo seguía dentro del plan, sin embargo, a un día de la realización del evento, se confirmó su cancelación. "Estimados amigos, les tenemos que comunicar algo terrible para nosotros, y para muchos. La cancelación definitiva de La Cumbre 2019. De este modo, este proyecto que ha intentado impulsar, defender y crear valor alrededor de la música chilena por más de doce años, llega a su fin", revelaron los organizadores del festival.
Es así como explicaron algunos factores que obligaron a poner fin a la Cumbre del Rock Chileno. "Sucumbimos frente a los eventos gratuitos, que fueron socavando las bases de nuestra propuesta (justamente lo inverso, cultivar valor, y estrechar la brecha de percepción entre artistas nacionales y extranjeros)", añadieron.
"Lo dimos todo, pusimos el corazón entero, todos nuestros recursos humanos y económicos para que esto funcionara. Llegamos hasta el final: El montaje estaba terminado, los artistas probaron sonido, pero… a punto de llegar a la meta, no lo logramos. Y lo perdimos todo", fue la reflexión de la producción.