La inspiración de los Beatles proviene de diferentes espacios. El lugar donde nacieron, una calle del barrio de dónde vivían, un ex amor y el nombre de una difunta grabado en una lápida -por nombrar algunos-.
Siendo los favoritos de la contracultura, su proceso de composición también tuvo como objeto algunos aspectos místicos -podría decirse que new age- de la era hippie.
Fool On The Hill: La canción que Paul McCartney escribió inspirado en el Tarot
El cantante reveló en una ocasión la anécdota detrás de una de las canciones de Magical Mystery Tour. ¿Su inspiración concreta? el arte de la lectura del Tarot.
Según cuenta el artista en su libro, Many Years From Now (1997), conoció el tarot gracias a una artista llamada Marijke Koger, quien llamó la atención de Brian Epstein y Mal Evans debido a los diseños psicodélicos y de fantasía que utilizaba en sus carteles y discos. Mas tarde sería invitada a trabajar los primeros bocetos para la portada de Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band.
"Conocía a Marijke, era una chica de aspecto bastante llamativo", recordó Paul. "Me leía la suerte en las cartas del Tarot, algo que no me gustaba demasiado porque no quería sacar la carta de la muerte un día. Todavía no me gustan ese tipo de cosas porque sé que mi mente se va a detener en ellas".
El Loco & el origen de la anécdota
Durante una lectura en particular, Paul sacó la misma carta una y otra vez: “Siempre me salía el Loco. Y recuerdo que yo me preocupaba y Marijke me decía: ‘No, no, no, el Loco es una carta muy buena. A primera vista parece una tontería, pero en realidad es una de las mejores cartas, porque es el inocente, es el niño, es esa lectura de tonto'”, precisó.
Fue esa idea del tonto interpretado como un sabio la que terminó por tocar una fibra emocional en McCartney, que recordó la forma en que los gurús de la India eran tachados de charlatanes. De esa forma nace Fool On The Hill como un llamado de atención hacia el afán de Occidente por desechar las filosofías orientales según recuerda Far Out Magazine.
"Día tras día, solo en una colina", canta en el primer verso. "El hombre de la ridícula sonrisa / Permanece perfectamente quieto / Pero nadie quiere conocerlo / Pueden ver que sólo es un tonto".
Puedes escuchar The Fool On The Hill a continuación:
