Los estudios de los Investigadores de la Universidad de McGill han llegado a la conclusión de que escuchar música es efectivo para reducir como sentimos el dolor descubriendo que el tempo es clave en su capacidad analgésica.
A estos estudios previos sobre como la música reduce la ansiedad, los científicos profundizaron en cómo el ritmo influye.
“En el pasado, se ha sugerido que la música relajante funciona mejor para aliviar el dolor, pero esto no parecía lo suficientemente preciso. Por eso, decidimos investigar si el tempo podía influir en la capacidad de la música para reducir el dolor” dijo Caroline Palmer, coautora del estudio.
Los investigadores reclutaron a 60 participantes, tanto músicos como no músicos. Para probar la hipótesis, a cada individuo se le pidió que marcaran el ritmo de la canción Twinkle, Twinkle, Little Star en una superficie táctil. Esto permitió medir su ritmo de producción espontánea.
Posteriormente, a los participantes se les expuso a un dolor leve en tres escenarios. Estos eran: en silencio, con música ajustada al ritmo natural y melodías aceleradas o ralentizadas en un 15% respecto a su ritmo.
Los resultados del experimento demostraron que si reduce la percepción del dolor en comparación al silencio. Sumado a esto, el alivio era más significativo cuando la canción coincidía con el ritmo natural de cada individuo. Los investigadores creen que el efecto se debe a la sincronización de las oscilaciones neuronales con el tempo.
La música como tratamiento para el dolor
La música siempre ha sido usada por sus efectos calmantes en terapia musical y rehabilitación física. Estudios previos han demostrado que la puede estimular la producción de dopamina y reducir los niveles de cortisol, la hormona del estrés.
Con esto puede comprobarse que tiene una capacidad analgésica, por lo que es recomendado escuchar música para sentirse mejor.
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