A lo largo de la historia de la música, múltiples estrellas de rock han terminado presos por controversias con las autoridades. Sin embargo, pocos tienen anécdotas tan curiosas como la del vocalista de Franz Ferdinand, quien recibió acusaciones de ser un peligroso espía internacional.
Y es que a diferencia de otros del género, la voz del grupo, Alex Kapranos, mantiene un bajo perfil en lo que respecta su vida privada y las controversias. Pero esto no evitó que se viera envuelto en una curiosa situación que hoy se recuerda con humor.
¿Qué pasó con el vocalista de Franz Ferdinand?
Durante la década de los 2000, Franz Ferdinand se convirtió en uno de los nombres más populares del rock alternativo. Gracias a su exitoso debut homónimo pudieron recorrer el mundo y para 2005 se preparaban para lanzar su segunda placa.
Dentro de sus viajes promocionales, la banda viajó a Rusia a promocionar las nuevas canciones que serían parte de este material. Sin embargo, el viaje rápidamente dio un giro inesperado y Franz Ferdinand se vio envuelto en una controversia de proporciones internacionales.
Tras exitosos conciertos en Moscú y San Petersburgo, la banda volvería a la ciudad de New York para completar su segundo disco. Sin embargo, cuando pasaban por la rutina de seguridad del aeropuerto, Alex Kapranos fue detenido luego de que se le informara que su nombre aparecía en una lista de "no volar".
La confusión rápidamente escaló cuando se enteró que aparecía como una "gran amenaza" para el país, todo por una confusión de identidad. Y es que, como comentó a The Times, su nombre en el pasaporte salía como Alex Huntley, por el apellido materno del vocalista de Franz Ferdinand. En una enorme coincidencia, este era el nombre que utilizaba un espía que había sido despedido de MI6 por trabajar para el servicio secreto.
Afortunadamente, Franz Ferdinand pudo seguir con su viaje cuando se dieron cuenta que los hombres no se parecían en nada, con el vocalista siendo más de 10 años menor que el espía. Sin embargo, aun así se demoró más de una hora para convencerlos de que él no era la persona que buscaban
