Luego del ataque perpetrado por Estados Unidos al aeropuerto de Bagdad que terminó con la vida del general Qasem Soleimani, el mundo está en incertidumbre. Las autoridades iraníes prometieron una “venganza terrible”, a lo que Donald Trump respondió con más amenazas de bombardeos.
La jornada de ayer fue el funeral del general Soleimani, una figura respetada en su país, y que congregó a miles. Sin embargo, varias personas murieron en el funeral del general iraní en Kerman, su ciudad natal. Así lo informaron agencias internacionales que citan a la televisión estatal de Irán.
Según los reportes, al menos 35 asistentes fallecieron en una estampida y otros 48 resultaron heridos en la procesión fúnebre de Qasem Soleimani.
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También, una procesión en Teherán reunió a más de un millón de personas, abarrotando las principales vías de la capital iraní.
Según la Casa Blanca, Soleimani era responsable y preparaba “ataques inminentes y siniestros contra diplomáticos estadounidenses y personal militar”.
El comandante en jefe de la Guardia Revolucionaria, Hosein Salamí, advirtió este martes que Irán se vengará de EE.UU. de forma "dura y decisiva". Además, uno de los primeros objetivos del gobierno y las autoridades iraníes será expulsar a todas las tropas extranjeras del país.
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