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Una guerra y una fertilización fallidas: Dos historias confusas que te sorprenderán

En una nueva edición de Un País Generoso, conversamos con Gabo León, quien nos contó dos historias confusas e insólitas que te divertirán.

Historias Confusas
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No cabe duda que a lo largo de nuestra existencia, han existido situaciones confusas que generan grandes historias, y bien lo sabemos en nuestro programa Un País Generoso.

En esta edición, invitamos a nuestro gran amigo Gabo León con su columna científica, quien nos contó dos grandes historias que te sorprenderán.

Batalla de Karánsebes

Sucedió en la ciudad de Rumania, cuando los austriacos estaban en Guerra con los turcos. En el momento en que los primeros llegaron a la localidad, se percataron de que no habían turcos, pero sí habían gitanos que tenían aguardiente. Lo cual debido al cansancio que le produjeron las batallas, decidieron comprárselos para beber y relajarse un poco.

Sin embargo, como es usual cuando se bebe alcohol, se emborracharon y se percataron de que la artillería turca se estaba tratando de meter a la ciudad. Por lo que hubo disparos, peleas y golpes.

Pero el momento más insólito, fue cuando un alemán gritó en alto halt (alto en español). Algo que se entendió como alá, generando indignación y mucha más pelea, lo cual provocó que los austriacos perdieran una guerra contra ellos mismos.

Batalla De Karánsebes
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Fertilización in vitro - Historias confusas

Cuando se lleva a cabo procedimientos en un laboratorio, el confundir un tubo de ensayo con otro sin duda provoca consecuencias que pueden llegar a ser desastrosas. Pero que también pueden llegar a desafiar las leyes.

Cuando se realiza una fertilización in vitro, se rompen varios paradigmas. Se puede tomar un óvulo, convertirlo en una muestra, y a través de un procedimiento realizado en un laboratorio, implantarlo en una mujer para realizar una fecundación.

Sin embargo, si se comete una equivocación, el embrión resultante puede llegar a ponerse en una mujer distinta. Por lo que, según dijo León a nuestro programa, "la capacidad de meter las patas es impresionante" en cuanto a un proceso de esta magnitud.

historias confusas
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Resulta que una pareja quería tener hijos y no podía, por lo que recurrieron a una clínica de maternidad en la ciudad de Los Ángeles, Estados Unidos.

Si bien se produjo un embrión biológico de un solo bebé, supieron que la mujer estaba esperando mellizos. La clínica se defendió diciendo que esto podía ocurrir, por lo que la pareja decidió esperar hasta el nacimiento de los bebés.

Sin embargo, cabe destacar que ellos eran asiáticos, y al momento del nacimiento, se dieron cuenta que ninguno de los niños tenía estos rasgos.

Por lo que decidieron recurrir a un examen de ADN, descubriendo que los niños no solo no eran de ellos, sino que entre ellos no tenían ninguna relación biológica.

Sucede que a la mujer le habían implantado dos embriones diferentes de otras dos parejas. Pero lo más insólito de todo, fue que los padres biológicos de los bebés demandaron la custodia de los niños, quitándoselos.


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