Después de unos días, y luego de la polémica por el anuncio de la Corte Suprema que instruyó la adquisición de 22 autos marca Lexus, la institución desistió de continuar con el proceso.
Los vehículos, cuyo valor es cercano a los 57 millones de pesos, totalizaban una compra por más de $1.250 millones. Jorge Sáez, secretario general del máximo tribunal del país, argumentó que el Poder Judicial es un ente autónomo en la ejecución tanto de presupuestos. Ello también se extiende a sus procedimientos de administración y gestión, según confirmó ADN.
Por otro lado, "la Corte Suprema toma sus decisiones en lo relativo a la adquisición de bienes y servicios, ponderando y analizando en su mérito los antecedentes de que dispone al momento de adoptarlas".
Ante ello, desde el organismo detallaron que tampoco son ajenos "a la contingencia y al contexto de los acontecimientos que preocupan al país". No obstante, detallaron que la renovación de los vehículos de sus ministros atiende a motivos "técnicos y de seguridad".
De esta forma, "se decidió dejar sin efecto el acuerdo adoptado para la compra de 22 automóviles Toyota Lexus, modelo ES300H que se tomó por la mayoría de los miembros que concurrieron a esa decisión”, confirma ADN.
La polémica compra de los Lexus
El 12 de febrero, y a través de una nota de La Tercera, se conoció la Corte Suprema instruyó la compra de 22 autos Lexus. Estos vehículos serían destinados a 21 ministros del tribunal y también a un fiscal judicial.
La compra de los vehículos causó molestia en otros integrantes de la institución. Según consignó el medio, comentaron que la compra resultaba desproporcionada. Además, y puesto que se trata de vehículos de alta gama, se considerarían como un "lujo".
Fue el 2 de febrero cuando al estacionamiento de la Corte Suprema llegaron tres Lexus de prueba. De esta forma, serían los mismos jueces quienes pudieran examinar su comodidad e incluso elegir el color del vehículo, lo que despertó las críticas de sus pares.
