Una muy común forma de hacer que una tienda tenga éxito, es relacionarla con el mundo de los videojuegos.
Desde hace un par de décadas, este negocio, tomó un papel fundamental en la juventud, que centraba cada vez más sus gusto hacia este tipo de entretención.
Obviamente, junto con las consolas de video, las tiendas también lograron evolucionar, haciéndose mucho más conocidas y sustentables.
Sin embargo, antes resultaba un poco más tedioso. Tanto porque el público no era tan alto o simplemente no existía la rapidez y alcance en redes para promocionar el negocio.
En base a esto, existió el caso de un vendedor, que tras malas ventas, tuvo que cerrar su stand de videojuegos definitivamente. Pero tuvo una brillante idea, al no desechar su mercancía, la cual hoy en día le sirve más que nunca.
Una decisión que hizo que sus videojuegos valieran oro
Normalmente, cuando las cosas no van bien, aparecen distintas opciones a las cuales hay que aferrarse.
Muchas veces, por más descabelladas que estas suenen, terminan siendo de gran ayuda, sobre todo en el futuro.
Esto es exactamente lo que le sucedió a un comerciante llamado Mark Odorisio, quien tuvo que plantearse qué hacer con todo lo que disponía a la venta.
En vez de votar todo o simplemente regalarlo, quiso guardar todo lo que tenía, con algunos títulos de gran renombre como el Mortal Kombat y el Chrono Trigger. Que a día de hoy son consideradas como verdaderas joyitas.
“Al diablo la venta. Prefiero arriesgarme a que... estos juegos valgan algo", corroboró el medio Infobae.
Al guardarlos por más de 20 años en un compartimiento, su hermano encontró las reliquias e investigó cuánto costarían los videojuegos ahora.
Después de una serie de preguntas en distintos lugares del mundo, terminaron accediendo a integrarse en algunas subastas donde esperan recibir cerca de 700.000 dólares.