Decir que la reunión de Oasis causó furor es quedarse corto, ya que la demanda por entradas fue astronómica, lo que provocó problemas con la ticketera.
Tanto así, que incluso el Gobierno británico tomará cartas en el asunto por los altos precios de los tickets para ver a los hermanos Gallagher.
El escándalo por las ventas de entradas de Oasis
Las entradas de los shows de reunión de Oasis estaban a cargo de Ticketmaster, empresa que está siendo duramente cuestionada en el Reino Unido. Esto luego que miles de fans de Oasis denunciaron los altos precios para el show.
La ministra de cultura del Reino Unido, Lisa Nandy, se comprometió a investigar el uso de "precios dinámicos" por Ticketmaster para los shows. Esta forma de vender las entadas hace que los precios de los tickets aumenten según la demanda.
Debido a esto, los precios se dispararon. Por ejemplo entradas para la actuación en Manchester el 12 de julio llegaron a los casi 3.000 euros, es decir, cerca de 3 millones de pesos. También, las entradas en el estadio Wembley de Londres el 26 de julio rebasaron los 7.000 euros, cerca de siete millones de pesos chilenos.
Precio aún más insólito considerando que el valor original de las entradas era de cerca de 180 mil pesos para espectadores de pie y entre 90 mil y 250 mil pesos chilenos para los asientos, dependiendo de la ubicación, según El País.
Oasis dispuso de cerca de 1,4 millones de tickets para los shows en el Reino Unido e Irlanda, pero las webs se colapsaron por la altísima demanda. Pese al precio elevado y a los inconvenientes técnicos, las entradas se agotaron rápidamente.
El Gobierno de Reino Unido se mete
Nandy dijo a la BBC que planea terminar con las "reventas fraudulentas" y asegurarse de que las entradas se vendan "a precios justos", añadiendo que era "deprimente ver precios enormemente inflados que excluyen a los fans comunes".
El Gobierno tiene previsto celebrar una consulta sobre los sitios web de reventa de entradas este otoño. El precio dinámico se incluirá ahora en el alcance de la consulta, confirmó Nandy, diciendo que los ministros analizarían "cuestiones relacionadas con la transparencia y el uso de precios dinámicos. Incluida la tecnología en torno a los sistemas de colas que lo incentivan".
La BBC informó que una colega de Nandy, la ministra laborista Lucy Powell, estaba entre los que terminó gastando más del doble del costo original para ver a Oasis debido al precio dinámico.
No es la primera vez que Ticketmaster se encuentra en problemas con los funcionarios del gobierno después de un fiasco de entradas. El año pasado, el Senado de los EE. UU. convocó una audiencia sobre la falta de competencia en la industria de las entradas.