El año 2019, una joven de 20 años presentó a un tribunal de la región peruana de Ica una denuncia por violación sexual por parte de un hombre de 22 años.
Así, el pasado jueves los magistrados tomaron la decisión de archivar el caso porque la denunciante usaba ropa interior de color rojo. Sus argumentos fueron respaldados por que “la máxima experiencia” indica que el uso de “este tipo de atuendo interior femenino suele usarse en ocasiones especiales para momentos de intimidad”.
Esta se tomó por los integrantes del Juzgado Penal Colegiado Supraprovincial Transitorio Zona Sur, en Ica, una ciudad ubicada unos 300 kilómetros al sur de Lima. Ante los dichos, mencionaron también que,
“(...) conlleva a inferir que la agraviada se había preparado o estaba dispuesta a tener relaciones sexuales con el imputado”, según información de CNN.
Además, los jueces mencionaron que en los testimonios de la denunciante existen “omisiones”. Por su parte, el imputado sostuvo que fue acusado de violación por “venganza”.
Ante esto, la Oficina de Control de la Magistratura (OCMA) informó este lunes 3 de noviembre que iniciará una investigación preliminar de la denuncia de la mujer, mientras que la Fiscalía solicitó la nulidad del caso y que se abra un nuevo juicio en otro tribunal para que se adecúe un mejor y más profundo estudio.
Indignación y protestas
Ante la decisión tomada por los jueces respecto de la denuncia por violación, distintos sectores del país se manifestaron en contra de esta. Así por ejemplo, el Ministerio de la Mujer manifestó su “profundo rechazo” ante los argumentos de los magistrados porque los consideran como estereotipados.
“La erradicación y sanción de la violencia contra las mujeres solo podrá ser posible con un Poder Judicial imparcial y consciente de su rol fundamental frente a los fines de la erradicación de la violación y discriminación basadas en género”
Además, la OCMA informó que se realizará una investigación a los jueces identificados como Ronald Anayhuamán Andia, Diana Jurado Espino y Lucy Castro Chacaltana.
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Así también, integrantes de colectivos feministas y de derechos humanos protestaron frente a las principales sedes del Poder Judicial del Ica y de Lima como una forma de rechazar los argumentos utilizados para archivar el caso de la mujer, considerándolos como una “sentencia machista”.